La Agencia Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) ha elevado la alerta ante una inusual tormenta geomagnética, clasificándola como de categoría G5, la más extrema, siendo la primera de esta magnitud desde octubre de 2003. La tormenta, generada por múltiples eyecciones de masa coronal (CME), impactó la Tierra a las 6:54 pm [EDT], según informó la entidad, y se espera que persista durante el fin de semana.
Esta inusual actividad solar podría tener repercusiones significativas en una amplia gama de tecnologías y sistemas de infraestructura crítica. Desde las comunicaciones de alta frecuencia (HE), muy alta frecuencia (VHF) y ultra alta frecuencia (UHF), hasta el funcionamiento de sistemas GPS, redes eléctricas, naves espaciales y navegación por satélite, podrían experimentar interferencias. Los operadores de infraestructura crítica han sido notificados para estar en alerta ante posibles perturbaciones.
El último evento de esta magnitud, categorizado como G5, tuvo lugar durante las Tormentas de Halloween en 2003, causando cortes de energía en Suecia y daños en transformadores en Sudáfrica, según datos proporcionados por la institución.
La fuente principal de esta actividad solar es un vasto y complejo grupo de manchas solares identificado como Región 3664 por la NOAA, que tiene un diámetro diecisiete veces mayor que el de la Tierra. Se prevé que esta región continúe generando actividad adicional en los próximos días.
Los meteorólogos espaciales de la NOAA han registrado al menos siete eyecciones de masa coronal, anticipando que los impactos en la Tierra podrían extenderse desde el viernes 10 de mayo hasta el domingo 12 de mayo de 2024.
Las eyecciones de masa coronal son explosiones de plasma y campos magnéticos de la corona solar que desencadenan tormentas geomagnéticas al dirigirse hacia la Tierra. La región 3664 de la NOAA ha sido identificada como una fuente recurrente de estas erupciones, lo que ha contribuido al aumento del nivel de alerta ante la posibilidad de perturbaciones significativas en el campo magnético y la infraestructura tecnológica terrestre.