Como Gobierno hemos cedido, hemos escuchado y planteado propuestas, ahora falta que la oposición en el mismo ánimo del diálogo, concrete sus voluntades en acuerdos transformadores para la dignidad de las y los trabajadores.
Por: Danitza Ortiz, Seremi Gobierno Región de Los Lagos
De manera habitual vemos como la variante de género se expresa en distintos contextos de la sociedad, en el diseño de políticas públicas, en el plano legislativo, pero también en situaciones en las que a menudo las mujeres están más expuestas a vulneraciones. Es por eso la que la Propuesta de Reforma de Pensiones impulsada por el Presidente Boric, considera precisamente disminuir las brechas de desigualdad entre hombres y mujeres a la hora de jubilar y recibir sus pensiones.
En nuestro país es sabido que el sistema de las AFP fracasó y por lo tanto tiene en la actualidad a cientos de pensionadas y pensionados con serias dificultades para enfrentar cada mes, teniendo incluso que priorizar un medicamento por sobre más o mejor alimentación y sumado a este ejemplo vemos un sistema que castiga a las mujeres por vivir más, por tener que asumir responsabilidades familiares de cuidado y que incluso, refleja la ingratitud del mercado laboral que suele generar un desincentivo a la contratación de mujeres por el sólo hecho de ser ellas quienes asumen un rol protagónico en el cuidado de sus hijos e hijas. Por esta razón, es que preocupa que la discusión de esta reforma se siga dilatando y que aún mantenga una resistencia porfiada y mezquina desde ciertos sectores políticos que parecieran tener oídos sordos a una de las grandes demandas de Chile en materia de seguridad social. Por esta misma razón es que como gobierno no sólo hemos tenido voluntades de diálogo, sino que además hemos modificado nuestra propia propuesta para avanzar en una reforma que logre conciliar posturas y plasme en su espíritu la voluntad de las y los trabajadores.
En este contexto, la reforma previsional plantea una nueva modificación para el 6% que está a cargo del empleador o empleadora y que busca fortalecer el empleo de las mujeres, por ejemplo con el financiamiento del derecho a sala cuna para madres y padres indiscriminadamente, en paralelo que se avanza con la compensación por la mayor expectativa de vida de las mujeres.
De manera más clara, nuestra propuesta presentada al congreso consiste en que el 6% se distribuya en un 1% para fortalecer el empleo y formalidad de las mujeres, en un 2% para la capitalización individual y el ahorro futuro de las personas y finalmente, un 3% para el Seguro Social transitorio, que permita que a todos a quienes cotizaron a lo largo de sus vidas y que aun así tienen una pensión muy pequeña, se les pueda subir su pensión 1 UF por cada 10 años cotizados.
Como Gobierno hemos cedido, hemos escuchado y planteado propuestas, ahora falta que la oposición en el mismo ánimo del diálogo, concrete sus voluntades en acuerdos transformadores para la dignidad de las y los trabajadores.