Por Gustavo Cid Asenjo – Director de Fresia Ahora SpA
En lo personal, envío un saludo cordial en estas horas, junto a mis mejores deseos.
En lo colectivo, que en este 2025 que llega, impregne en los poderes del Estado el sentido universal de personas como nosotros, que buscamos paz, tranquilidad, bienestar, y el fin de la odiosidad. Que el desquiciamiento de algunos, mal enquistado o infiltrado, especialmente en el poder legislativo (salvo excepciones), se erradique o sea neutralizado por el sentir del pueblo, para que allí tengamos legítimos representantes de quienes los eligieron, no para destruir ni polarizar. El ciudadano común los puso allí, no para representar sus «principios» personales o partidarios, lo que resulta en un engaño o traición al pristino sentir popular: LA MAYORÍA.
Que el 2025 sea un año de lógica en el devenir de quienes son parte activa y elocuente de los líderes y lideresas de nuestra Nación. O son de principios sólidos, o bien, que lo demuestren con sentido altruista y transversal, no desde trincheras.
Hagamos, amigos, de 2025 un año de esperanza, de cambio, frente al perverso estatus quo en el que la élite nos mantiene.
En lo personal, mi deseo es que, al margen de este secuestro de nuestros pensamientos personales y de país, no solo nos liberemos de este claro escenario adverso, sino que, a pesar de él, sigamos creciendo, unidos como personas y en familia, el mejor reducto para amarnos y generar felicidad, con el mejor de los ánimos y empoderarnos, PORQUE SOMOS MÁS.
¡FELICIDADES!
