22 de noviembre de 2024

NUESTRO MENSAJE EN EL DÍA DEL TRABAJO. NUNCA ES MUCHO…

El Primero de Mayo se celebra el Día del Trabajo en honor a todos los hombres y mujeres que con su labor diaria buscan un mejor futuro y hacer crecer a la sociedad.

Hace muchos años, se escribió una página trágica en la historia de los derechos de los trabajadores (as). Hoy, con cambios y mejoras, la actividad salarial, sigue viviendo momentos de incertidumbre y menoscabo a la acción social y de apoyo a la estabilidad de los respectivos Estados.

Vaya desde este diario, nuestro mensaje optimista para los trabajadores de la macro-región sur, en su lucha por mejores condiciones laborales, respeto, dignidad y mejor calidad de vida. El deseo que en nuestro país, se den las condiciones conciliadas, no unilaterales, de valorización por el inmenso aporte, permanente y que edifica a un país como el nuestro, a los trabajadores en su día. Falta y mucho y por ello tenemos que luchar para romper brechas y generar un nuevo estatus. Chile nace y crece en base a sus trabajadores (as), desde que es República. Sin ellos, la Patria sería, un Estado al que le falta su estructura vital.

Más que felicitar, recordar, conmemorar, un mensaje franco, pero con optimismo en el marco de la estabilidad democrática, que todos los trabajadores merecemos, aunque así no se valore. Nuestro saludo republicano a todas y todos, sin ideologismo ni discursos acomodaticios.

Un abrazo.

HISTORIA, EN BREVE:

La historia del día del Trabajador se remonta hacia la segunda mitad del siglo XIX, cuando debido al rápido avance industrial, creció mucho la concentración trabajadora de hombres y mujeres, lo que originó el abuso en los salarios de los obreros, hecho que marcó enfrentamientos, agitaciones y luchas entre trabajadores y empleadores. Lo anterior hizo que los trabajadores se agruparan en sindicatos para defender sus derechos y lograran mejoras en la calidad de vida laboral.

Día de Trabajo y su historia

Cuando corría el mes de noviembre de 1884 se celebró en Chicago el IV Congreso de la American Federation of Labor. Este Congreso tenía como objetivo, proponer que a partir del 1 de Mayo de 1886 el sector patronal de los Estados Unidos, respetará la jornada laboral de ocho horas, de lo contrario los trabajadores entrarían en huelga y concentraciones obreras. En 1886 el presidente de los Estados Unidos Andrew Johnson, promulgó la Ley de Ingersoll estableciendo la jornada laboral de ocho horas, lucha que se dio gracias al trabajo de Ira Steward, obrero dedicado a la mecánica. La Ley quedó sólo en el papel, no se cumplió en ningún termino, lo que produjo que las organizaciones sociales y sindicales comenzaran la lucha por su cumplimiento.

«A partir de hoy, sólo ocho horas diarias; ni una más», eran las arengas que voceaban los obreros unidos en huelga el 1 de mayo de 1886.