Gladys Marín, nacida el 16 de julio de 1941 en Curepto, dedicó su vida a la política y la educación, forjando un camino de liderazgo y compromiso desde muy joven. Su madre, Adriana Millie, maestra primaria, y su padre, Heraclio Marín, campesino, influyeron en su formación y en la construcción de su carácter resiliente y combativo. Tras el abandono de su padre, doña Adriana se encargó de criar a sus cuatro hijas, inculcándoles valores de fortaleza y solidaridad.
Desde su juventud, Gladys se destacó como líder en diversas organizaciones cristianas y estudiantiles, y en 1957, al titularse como profesora, ingresó a las Juventudes Comunistas, marcando el inicio de su carrera política. Fue elegida diputada a los 23 años, convirtiéndose en una de las voces más jóvenes y valientes en el Congreso, representando a las comunas del Segundo Distrito de Santiago.
A lo largo de su vida, Gladys Marín enfrentó innumerables desafíos, incluyendo el exilio tras el golpe militar de 1973 y la desaparición de su esposo, Jorge Muñoz Poutays, detenido por agentes de Pinochet en 1976. Sin embargo, su espíritu indomable la llevó a regresar clandestinamente a Chile en 1978, donde continuó su lucha contra la dictadura y desempeñó un papel crucial en la resistencia.
Como Secretaria General y luego Presidenta del Partido Comunista, Gladys fue una de las primeras mujeres en ocupar posiciones de liderazgo en la política chilena, abriendo camino para futuras generaciones. En 1998, hizo historia al presentar la primera querella contra el exdictador Augusto Pinochet, demostrando su compromiso inquebrantable con los derechos humanos.
En las elecciones presidenciales de 1999, Gladys Marín se postuló como candidata, obteniendo un significativo apoyo popular y destacándose como una voz fuerte y decidida en la defensa de la democracia y la justicia social. Su lucha incansable y su capacidad para movilizar a las masas la convirtieron en un símbolo de resistencia y esperanza para miles de chilenos y chilenas.
Hoy, recordamos a Gladys Marín no solo por su valentía y dedicación, sino también por su papel fundamental en el empoderamiento de las mujeres. Su vida es un testimonio de que las mujeres pueden y deben ocupar espacios de liderazgo, enfrentando con determinación los desafíos y luchando por un mundo más justo e igualitario.
En un tiempo en que los derechos de las mujeres y la igualdad de género siguen siendo temas de vital importancia, el legado de Gladys Marín nos recuerda que la lucha debe continuar. Su ejemplo nos inspira a seguir trabajando por una sociedad en la que todas las personas, sin importar su género, tengan las mismas oportunidades y derechos.
Conmemoramos a Gladys Marín con profundo respeto y gratitud, honrando su memoria y su invaluable contribución a la historia de Chile. Que su legado nos guíe en nuestra búsqueda de justicia, igualdad y dignidad para todos y todas.
En el natalicio de Gladys Marín, recordamos con cariño y admiración su incansable lucha por la justicia, los derechos humanos y la democratización del país. Con valentía y convicción, abrió camino a las mujeres en la política chilena al ser electa secretaria general de las JJCC y… pic.twitter.com/SFKM46lWvk
— Camila Vallejo Dowling (@camila_vallejo) July 16, 2024
FRASES CELEBRES :
«Las llamo a ser mujeres plenas, a sufrir por el dolor ajeno, seamos solidarias y sensibles, enamorémonos todos los días, seamos ágiles, livianas como las mariposas y fieras ante la injusticia”»
«Sin libertad y sin justicia no hay persona que respire. Los pulmones se encogen y el corazón se atrofia.»
«Nunca hay que dejar de luchar, aunque en eso se nos vaya la vida»
«Sabemos que la sociedad humana no puede avanzar sin la participación plena de la mujer, Y sabemos que el siglo XXI será de los seres humanos, cualquiera que sea su opción sexual, raza o etnia, seres humanos iguales en derechos y dignidad».
«La vida es hoy».